/Fuente: Colegio de Veterinarios de la Provincia de Buenos Aires /

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El Ministerio de Desarrollo Agrario de la Provincia de Buenos Aires presentó una nueva normativa para la elaboración de chacinados y salazones de pequeña escala, con el objetivo de formalizar la actividad artesanal y garantizar la inocuidad de los alimentos que se producen y comercializan en el territorio provincial.

La disposición establece que los establecimientos alcanzados serán aquellos cuya producción no supere los 250 kilos semanales o 1000 kilos mensuales, y deberán cumplir con condiciones edilicias e higiénico-sanitarias específicas, como el uso de materiales adecuados, disponibilidad de agua potable, control de temperaturas, iluminación, ventilación y espacios de elaboración apropiados.

En ese marco, el ministro de Desarrollo Agrario, Javier Rodríguez, destacó:

“Generamos esta nueva normativa en materia sanitaria adecuada para la pequeña y la mediana escala, que estará habilitada para comercializar su producción en toda la provincia, garantizando la inocuidad de los alimentos”.

El rol del veterinario

La normativa prevé que, además de las condiciones edilicias, los establecimientos deberán contar con asesoramiento veterinario, encargado de fiscalizar los procesos productivos y velar por la seguridad alimentaria. El profesional actuará en función del volumen de producción declarado y de la estacionalidad propia de la actividad artesanal.

Ante esta disposición, el Colegio de Veterinarios de la Provincia de Buenos Aires emitió la Resolución Nº 267, que establece los honorarios mínimos y categorías de contratación profesional para estos establecimientos:

• Hasta 2 horas semanales: 50 GAVET (1 a 200 kg/mes).
• Hasta 3 horas semanales: 100 GAVET (201 a 500 kg/mes).
• Hasta 4 horas semanales: 150 GAVET (501 a 750 kg/mes).

A partir de los 751 kg mensuales, se aplicará la Resolución Nº 97/2011, que fija un mínimo de 5 horas semanales con honorarios del Veterinario de Registro (185 GAVET).

Compromiso institucional

Desde el CVPBA se remarcó la importancia de este paso en la regulación de la producción artesanal:

“Este esquema no solo brinda herramientas de formalización a los pequeños productores, sino que también refuerza el rol indelegable del médico veterinario en el cuidado de la salud pública, a través del control sanitario y la fiscalización en origen”.

De esta manera, el Colegio acompaña la implementación de la normativa, poniendo en valor la tarea profesional y garantizando que los alimentos que llegan a la mesa de los bonaerenses cumplan con los estándares de seguridad requeridos.

>> Resolución del Ministerio
>> Resolución CVPBA ( honorarios)